Los trabajadores de base dirigen la campaña de organización
CUADERNO DEL REPORTERO
Por Argiris Malapanis
Las observaciones que siguen se basan en la visita que hizo Panorama-Mundial el 3 de noviembre del 2021 a la carpa del centro organizador del Sindicato de Trabajadores de Amazon (Amazon Labor Union—ALU por sus siglas en inglés) frente al centro logístico JFK8 de Amazon en Staten Island, Nueva York. Es un suplemento al artículo informativo “Trabajadores de Amazon en Nueva York solicitan reconocimiento legal de su sindicato“, publicado por Panorama-Mundial el 5 de noviembre. Aquellos identificados por su nombre de pila pidieron a Panorama-Mundial que no publicara sus apellidos para reducir lo más posible la posibilidad de represalias por parte de la empresa.
En la parada del autobús
Llegué a la parada de autobús frente a la entrada principal del gigante centro logístico JFK8 de Amazon alrededor de las 3:30 pm del 3 de noviembre, nueve días después de que los partidarios de Amazon Labor Union (ALU) presentaran más de 2 mil firmas ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB) en su esfuerzo por realizar una elección para obtener representación sindical. Estuve allí poco más de una hora antes de que llegaran los organizadores de ALU para instalar su carpa, que utilizan como centro organizativo y para recoger tarjetas de autorización sindical firmadas.
Durante esa hora hablé con dos docenas de trabajadores que esperaban subir al autobús después de terminar su turno. La mayoría de los trabajadores que conocí o vi subirse o bajarse de los autobuses eran jóvenes y en su mayoría negros o latinos.
De las dos docenas de trabajadores que entrevisté en la parada del autobús, la gran mayoría apoyan el esfuerzo de ALU por organizar un sindicato en el JFK8 y los tres almacenes circundantes de Amazon, denominados LDJ5, DYY6 y DYX2.
“Un sindicato nos beneficiaría”, dijo Justin, quien ha trabajado en LDJ5 durante dos años. “Ahora no tenemos protección contra los despidos arbitrarios. Amazon utiliza un sistema disciplinario de puntos. Si acumulas seis puntos quedas despedido. Si llegas tarde, los gerentes te castigan con 1 punto y medio. Si te tomas un día libre del trabajo te dan otros 2. Es fácil llegar al límite y ser despedido”.
Justin agregó que los turnos largos, a menudo de 12 horas, especialmente el turno nocturno de 5 pm a 5 am, y el acelerado ritmo de trabajo resultan en lesiones, otra queja común de los trabajadores. “Éstas son algunas de las razones por las que ya firmé la tarjeta de autorización del sindicato”, dijo Justin, quien tiene cerca de 30 años.
Incluso entre los que recientemente han comenzado a trabajar en Amazon, el apoyo de la ALU ha sido muy firme. “He estado aquí durante dos meses”, dijo Aziz, quien trabaja en JFK8. “Pero creo que un sindicato puede darnos más confianza, más seguridad laboral”.
Otros fueron más reservados al expresar su opinión. “No sé mucho sobre el sindicato”, dijo Susan, una joven trabajadora que comenzó hace un mes.
“Si hubiera una votación mañana, votaría por el sindicato”, dijo Carmen Díaz, una trabajadora de mediana edad originaria de República Dominicana que ha trabajado en JFK8 durante 2 años. Agregó, sin embargo, que no ha firmado una tarjeta de autorización sindical. “He trabajado en otros empleos antes, inclusive en empresas con sindicatos, y los salarios y beneficios que tenemos en Amazon ahora son los mismos o mejores”, dijo. “Estoy bien con el trabajo aquí”. Carmen explicó que votaría por el sindicato “porque tengo un hijo de 22 años que comenzó a trabajar aquí hace un año. Ya ha firmado una tarjeta sindical”.
Sólo un trabajador entre los entrevistados, Philip, expresó su hostilidad a la ALU, pero no quiso explicar por qué.
La carpa organizadora
Chris Smalls, uno de los principales organizadores de ALU, y Ray, un voluntario que apoya la campaña de organización sindical, se detuvieron en un SUV en la parada del autobús alrededor de las 4:45 pm. Ray trabajó para Amazon en el pasado, pero renunció durante la pandemia porque “la falta de medidas adecuadas de seguridad por parte de la compañía nos puso a mí y a mi familia en peligro”, dijo. Ahora él maneja su propio negocio y ayuda regularmente como voluntario en el centro organizador. La ALU ha utilizado el Fondo de Solidaridad Sindical de Amazon para comprar un vehículo para transportar los suministros, así como para comprar alimentos, camisetas y otros materiales de promoción.

Chris y Ray instalaron una carpa con mesas frente a la parada del autobús. Colocaron literatura del ALU, tarjetas de autorización sindical y portapapeles en las mesas para que los trabajadores pudieran inscribirse con el sindicato. También pusieron sillas plegables en un semicírculo, con una hoguera al centro. “La pasamos aquí toda la noche”, dijo Connor Spence, otro organizador de ALU que llegó más tarde. “Necesitamos que la hoguera está caliente”. Empezó a hacer bastante frío después del anochecer.
La primera vez que los organizadores de ALU instalaron esta carpa fue en abril, cuando se inició el esfuerzo por organizar el sindicato. Los que apoyan al sindicato han estado organizando barbacoas y recogiendo firmas de los trabajadores con las tarjetas para pedir una elección sindical. “Hemos estado haciendo esto las 24 horas del día, 7 días a la semana, llueva o truene”, dijo Smalls.
La pizza estaba en el menú esta noche. Docenas de pizzas arribaron a la carpa alrededor de las 5 pm. “¿Cuánto?” era una pregunta frecuente de los trabajadores que pasaban a pie o en auto. “Es gratis”, era la respuesta. Todos los trabajadores estaban invitados a disfrutar de una rebanada independientemente de su actitud hacia el sindicato. “Hemos estado haciendo esto todas las noches de esta semana”, dijo Connor, “pero es caro”. Lo hicimos para celebrar la entrega de las firmas ante la NLRB, un gran avance en el esfuerzo de organizar el sindicato, explicaron Connor y otros organizadores. Recaudan fondos por medio de una cuenta de GoFundMe, que hasta ahora ha recibido más de $ 40,000 de parte de más de 600 contribuyentes, con una meta de $ 50,000.
Alentamos a nuestros lectores de Panorama-Mundial a que apoyen esta importante campaña de organización sindical. Visite el sitio web de ALU (https://amazonlaborunion.org/) y corra la voz sobre la lucha que estos trabajadores están liderando. Enliste a su sindicato y a otras organizaciones a que aprueben resoluciones de respaldo al esfuerzo de organización de la ALU, y pídales que ofrezcan apoyo financiero. Haga una contribución en la página GoFundMe del sindicato y anime a otros a hacer lo mismo. Las donaciones pueden hacerse aquí: https://www.gofundme.com/f/support-the-amazon-labor-union
La importancia de ganarse la confianza de los trabajadores
“Acabo de regresar al trabajo, un año después de quedar despedido por Amazon”, dijo Jason Anthony, otro organizador de ALU de origen puertorriqueño. Explicó que la compañía lo había despedido alegando mala asistencia. “Cualquier persona despedida por esa razón tiene que esperar más de un año antes de solicitar nuevamente”, dijo. “Pero Chris, Connor y los demás siguieron presionando y hoy fue mi primer día de regreso”. Anthony dijo que esto ha fortalecido su respaldo a la ALU y su decisión de instar a otros trabajadores a que respalden al sindicato.

Anthony señaló que Amazon contrató al Grupo Burke, el equipo antisindical que utilizó para derrotar el esfuerzo por organizar un sindicato en Bessemer, Alabama, a principios de este año. Algunos de estos rompehuelgas son mexicanos o otros que hablan español, tratando de separar a los latinos de los otros trabajadores valiéndose de “argumentos en español” a favor de la compañía, explicó. “Pero hay muchos más de nosotros, hispanos, que apoyamos a la unión”, dijo.
“La administración apesta”, dijo Sativa López, quien también es puertorriqueña y ha estado trabajando en JFK8 durante aproximadamente un año y medio. “Las sanciones disciplinarias son ridículas”, agregó. “Los gerentes te pueden sancionar por ‘mala calidad’ o ‘productividad’ y a menudo no te avisan sino hasta una semana después, lo que va en contra de sus propias reglas”. López dijo que ya firmó una tarjeta de autorización sindical, pero que aún no es organizadora cabalmente.
López explicó que se lesionó en el trabajo dos veces. La primera vez cuando una caja llena de sobres se cayó de la parte superior de un camión mientras ella estaba en el suelo inclinada, descargando el vehículo, y le pegó en la espalda, dijo. La gerencia trató de hacer que siguiera trabajando en lugar de ofrecerle atención médica inmediata, agregó. La segunda vez necesitaba hielo por una lesión en la mano, pero la compañía insistió en que completara un largo proceso de formularios antes de proporcionar el alivio necesario. “Me fui y conseguí mi propio hielo”, dijo López. “El sindicato puede ayudarnos a mejorar estas condiciones”, agregó.

“Confío en el sindicato”, dijo Kodah Ushiro, quien había trabajado para Amazon en San Bernardino, California, antes de mudarse a Nueva York y conseguir un trabajo en las instalaciones de la compañía en Staten Island hace un año. El día de mi visita esa fue una opinión expresada por muchas trabajadoras y muchos trabajadores.
‘Los trabajadores son el sindicato’
Un letrero desplegable, instalado en la acera junto a la carpa del sindicato, decía: “Amazon Labor Union. Pregúntenos por favor. Más de 2 mil trabajadores ya firmaron”. El mensaje llamó la atención de muchos de los cientos de trabajadores que pasaron por allí durante los cambios de turno. “La dinámica está llendo a nuestro favor desde que presentamos ante la NLRB”, dijo Connor. “Más personas, inclusive los trabajadores que se habían mostrado reacios a apoyar al sindicato, se me han acercado en el trabajo durante la última semana para pedir tarjetas sindicales”.
Al mismo tiempo, Connor, Smalls y otros organizadores explicaron que la elevada tasa de rotación de la fuerza laboral de Amazon, que es aproximadamente del 150 por ciento al año—casi el doble que las industrias minoristas y de logística en general—presenta un desafío al esfuerzo de establecer un sindicato. Puede ocurrir que muchos trabajadores que han firmado tarjetas sindicales ya no estén trabajando en Amazon cuando se lleve a cabo la votación de representación. Por eso es que la ALU presentó el lote inicial de firmas ante la NLRB tan pronto como calcularon que habían superado el umbral del 30% de la fuerza de trabajo, que es lo que la ley laboral requiere para que el mecanismo de elegir una representación sindical se ponga en marcha.


En las dos semanas transcurridas desde que presentaron las firmas ante la NLRB por el reconocimiento sindical, los organizadores de ALU dicen que han recolectado 300 firmas adicionales. De ser necesario, tienen planeado presentar este nuevo lote de tarjetas sindicales ante la junta laboral para garantizar un voto.
Este reportero fue testigo cuando una docena de trabajadores firmaron tarjetas sindicales la noche del 3 de noviembre.
Un trabajador tenía dudas antes de firmar. “Escuché que si el sindicato gana podemos perder los beneficios que ya tenemos”, dijo.
“Asegurarnos de que eso no suceda depende de nosotros “, respondió Anthony. “Los trabajadores son el sindicato”. En este caso ese argumento ganó otra firma más.
“Continuaremos hasta que sepamos que más de la mitad de la fuerza de trabajo apoya al sindicato”, dijo Anthony a Panorama Mundial. “Es por eso que estoy feliz de volver al trabajo. Me necesitan. Esto es divertido”.
Panorama-Mundial da las gracias a Barbara Mutnick en Nueva York por la copia edición de este artículo. ¡Bienvenida a nuestro equipo voluntario de copia edición de textos!
Categories: Movimiento Obrero / Sindicatos