Movimiento Obrero / Sindicatos

Engranaje de la organización de un sindicato en instalación de Amazon en Carolina del Norte


Entrevista con Destiny Blackwell



Por Mark Satinoff

El enorme almacén de Amazon de 186 mil metros cuadrados, llamado RDU1 Fulfillment Center, se encuentra en Garner, Carolina del Norte (NC), a pocas millas del centro de la ciudad de Raleigh. Se inauguró en el 2020 y emplea a unas 6 mil personas.

El grupo Carolina Amazonians United for Solidarity and Empowerment (C.A.U.S.E.), fundado en enero del 2022, se auto describe como “un movimiento liderado por trabajadores que defiende los derechos de los trabajadores y se organiza para combatir la corrupción y la explotación de Amazon”. No está afiliado a ningún sindicato establecido, sino que busca formar uno.

CMiembros de C.A.U.S.E. organizándose frente al centro RDU1 en Garner, Carolina del Norte. (Foto: Captura de pantalla del video de Deutsche Welle en inglés titulado “Estados Unidos: Nuevos sindicatos en ascenso“).

Entrevisté a Destiny Blackwell, una trabajadora de 25 años que trabaja en RDU1, forma parte del Comité Directivo de C.A.U.S.E. y es presidenta de su Comité de Publicidad. Ella es una stower, o sea que suma artículos al inventario del almacén. Trabaja un turno de doce horas, de las 6:00 PM a las 6:30 AM.

Blackwell tiene experiencia previa como organizadora comunitaria, pero no como parte del movimiento obrero. Mientras estudiaba en la Universidad Estatal de Winston-Salem, una escuela pública históricamente negra, ella organizó su primera protesta.

“Fue en torno al asesinato policial de Edwin McCray, un automovilista negro, en Winston-Salem en 2018. También organizamos campañas para remover la estatua de la Confederación del sur, y logramos que la historia del pueblo Afroamericano estuviera disponible en todas las escuelas secundarias”, dijo. “Ese es el tipo de organización comunitaria que yo estaba haciendo”, explicó.

Cuando Blackwell se mudó a Durham en el 2021, consiguió un trabajo en el Centro de Cumplimiento RDU5 de Amazon en esa ciudad. Inspirada por el grupo C.A.U.S.E. que recién se había formado, se transfirió a RDU1 para unirse a la lucha allí.

La fuerza laboral de RDU1 es “sesenta por ciento negra, treinta por ciento latina, y el resto personas blancas de áreas rurales e inmigrantes del sudeste asiático y África”, dijo Blackwell. Hay una proporción similar de hombres y mujeres, de jóvenes y gente de mayor edad. La administración no es así. “Hay mucha más gente blanca en el liderazgo, como en operaciones, subgerentes y asistentes de operaciones, que entre los trabajadores en la planta”.

Destiny Blackwell (izquierda) y Ayanna trabajan en RDU1 en Garner, Carolina del Norte, y son miembros del comité directivo de C.A.U.S.E. (Foto: C.A.U.S.E.)

Construyendo una red, reclutando líderes

C.A.U.S.E. aún no ha alcanzado la etapa en que pueda empezar a recolectar las firmas que serían legalmente requeridas para que la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB) programe una elección sindical.

“Nuestra meta es realizar elecciones, eso es lo que queremos. Pero sabemos que aún no estamos listos para una elección”, dijo Blackwell. “Nos estamos preparando, asegurándonos de que todos nuestros comités organizadores funcionen correctamente, para tener todos los elementos listos para poder alcanzar a todo el edificio. Estamos tratando de asegurarnos de tener a líderes en todos los departamentos. En este momento estamos haciendo inventario de nuestro edificio.

“Por ejemplo, tenemos el turno de día en el primer piso sólido. Tenemos un montón de apoyo allí. Pero arriba tenemos quizá sólo la mitad de los pisos organizados. Así que sabemos que tenemos que reclutar más stowers y arañas de agua [otra categoría de trabajo en el almacén]. Por eso es que aún no hemos lanzado nuestra campaña para pedir una elección. Todavía estamos consolidando nuestra red como una infraestructura”.

El comité directivo de C.A.U.S.E. tiene unos quince miembros y se reúne cada dos semanas. Hay otros cuatro comités: recaudación de fondos (que ha creado una página de GoFundMe), relaciones públicas, reclutamiento y quejas. Las reuniones de la membresía se llevan a cabo semanalmente. La asistencia varía de 15 a 60 o más trabajadores.

Las 13 personas fotografiadas son en su mayoría miembros del comité directivo de C.A.U.S.E.  (Foto: C.A.U.S.E.)

Dadas las complejidades de los diferentes patrones de los turnos (días, noches, tiempo parcial, tiempo completo, tiempo flexible y tiempo reducido), los días libres y los largos viajes al trabajo, la mayoría de las reuniones, por ahora, se llevan a cabo en Zoom. “Ocasionalmente las personas llaman desde el trabajo. Se supone que no debes hacerlo. Hay una política contra el uso de auriculares en el trabajo y a veces toman al azar fuertes medidas para frenarlo”, dijo Blackwell. Pero todo eso está cambiando. “Estamos llegando al punto en que tenemos la capacidad de tener reuniones externas regularmente, en persona y lejos del lugar de trabajo. Esto nos ayudará a entablar buenas relaciones y planificar mejor”.

El pago inicial en RDU1 es de $15.50 la hora. Aunque es el doble del salario mínimo federal de $7.25 la hora, cae muy por debajo del salario digno calculado para el condado de Wake, en Carolina del Norte. Han llegado muchas compañías tecnológicas, como Facebook, Apple y Google, que han abierto grandes operaciones en el área de Raleigh Durham, lo que ha contribuido a un aumento en los costos de la vivienda.

“Muy pocas personas que trabajan en Amazon pueden darse el lujo vivir en Garner”, dijo Blackwell. Esto ha obligado a muchos trabajadores a encontrar vivienda más lejos en las zonas rurales, lo que hace que los viajes al trabajo sean largos. Blackwell explicó: “Todos los que trabajan en Amazon saben que el dinero no alcanza para vivir. Y esa es la razón principal que la mayoría de la gente tiene para querer organizarse. No nos pagan lo suficiente para vivir y venir a trabajar a Amazon, y eso es realmente lo que motiva tan fuertemente a la gran mayoría de la gente”.

Esto es lo que un trabajador tuvo que decir al respecto.

RDU1 es masivo.  Amazon convirtió una antigua planta de alimentos de ConAgra, que cerró en 2011, en un mundo distópico con miles de robots en cuatro pisos. Blackwell lo describe como “un perímetro de trabajadores alrededor del edificio con los robots en el centro”. En su piso hay más robots que trabajadores. Una de las principales quejas de los trabajadores son los descansos insuficientes.

Dentro de RDU1, el gigante centro logístico de Amazon en Garner, Carolina del Norte, antes de su inauguración en el 2020. (Foto: CBS)

“Nuestro edificio tiene aproximadamente una milla de largo por media milla de ancho”, dijo Blackwell. “Lo llaman La Milla Verde, porque hay una línea verde que va por el centro. Y mide literalmente una milla. Si estás en uno de los pisos superiores tienes que caminar por el perímetro para evitar a los robots. Puede tomar fácilmente seis minutos caminar hasta la sala de descanso. Si estás en el otro lado del edificio, puede tomar quince. Pierdes tanto tiempo caminando a la sala de descanso y de regreso que muchos trabajadores terminan almorzando sentados en el suelo o en una escalera en su estación de trabajo”.

Darren es un trabajador de RDU1 confinado a una silla de ruedas. “Se supone que Amazon debe acomodarlo con un escritorio más bajo para que pueda alcanzar todo y hacer lo que se supone que debe hacer”, explicó Blackwell. “No le dieron nada y amenazaron con despedirlo cuando no lograba cumplir con la tasa”, dijo Blackwell.

Darren describe en un tweet de C.A.U.S.E. cómo la vigilancia constante de Amazon y el tiempo de descanso inadecuado le recuerdan su tiempo en prisión.  (Foto: Captura de pantalla del video de Twitter)

En un tweet de C.A.U.S.E., Darren cuenta cómo la vigilancia constante y el tiempo de descanso inadecuado le recuerdan su tiempo en prisión.

Trabajadores-organizadores docentes

C.A.U.S.E. está circulando una petición que presenta siete reivindicaciones a la gestión de Amazon. La usa también como instrumento para involucrar a los trabajadores en la conversación, responder a sus preguntas, educar y reclutar a nuevos miembros. También es una forma de medir su creciente apoyo. Hasta la fecha, 400 trabajadores han firmado la petición. C.A.U.S.E. hace seguimiento con una llamada telefónica a todos los que firman. “Uno de los trabajos del comité de reclutamiento es atraer a personas que han mostrado apoyo y pedirles que también distribuyan la petición. Eso es parte de la capacitación de nuestros compañeros de trabajo para que también se conviertan en organizadores”, dijo Blackwell.

Amazon ya ha cedido en dos de las reivindicaciones, una de las cuales es la formación de un comité de apelaciones y quejas. “No sé si tenían la intención de hacerlo, pero pusieron a algunos miembros de C.A.U.S.E. en el comité de apelaciones, por eso cuando las personas son despedidas y apelan su despido, ahora hay un comité de apelaciones de empleados ante los cuales pueden presentarse”, dijo Blackwell.

Cuando le pregunté si planean presentar la petición a la gerencia, Blackwell dijo: “No hemos decidido qué vamos a hacer. No estamos afiliados a un sindicato. Todos somos trabajadores-organizadores. Y así todos estamos aprendiendo a ser organizadores al mismo tiempo que nos estamos organizando. Así que cuando se trata de cosas como la campaña telefónica, teníamos a todas a esas personas que se inscribieron porque estaban interesadas.

“Nadie sabía cómo hacer una campaña por teléfono. Tuvimos que enseñarles a todos cómo hacerlo. No sabemos si vamos a llevarle entre todos la petición al jefe o si solo la vamos a usar como instrumento de organización”.

C.A.U.S.E. marca días específicos para repartir folletos. El folleto tiene un código QR da enlace a la petición. Blackwell explicó que, debido a la alta tasa de rotación, Amazon tiende a contratar en campañas concentradas. “Cuando contratan a más personas, es hora de repartir volantes, porque hay un grupo completamente nuevo de personas con las que aún no hemos hablado. Cada vez que repartimos folletos, encontramos un montón de gente nueva que está interesada. Hacemos un seguimiento con reuniones de interés y sesiones de capacitación para desarrollar nuevos líderes. Después de unas semanas terminamos de procesar a todos los que se pusieron en contacto con nosotros desde el último volante. Y entonces lo hacemos otra vez”.

Aquí está Azhani de C.A.U.S.E. haciendo un llamado a estudiantes del HBCU (Universidades y Colegios Históricamente Negros) para que salgan y ayuden a distribuir el volante.

Azhani de C.A.U.S.E. haciendo un llamado a estudiantes universitarios para que ayuden a distribuir volantes para promover el esfuerzo de organización sindical. (Foto: Captura de pantalla del video de Twitter)

Durante el intenso calor y la humedad de un día de verano en Carolina del Norte, mientras los miembros de C.A.U.S.E. estaban repartiendo volantes en el estacionamiento, los altos directivos de la gerencia salieron a ofrecer paletas a los trabajadores“¡Quédense con sus paletas, queremos un SALARIO DIGNO!”, gritó el reverendo Ryan Brown, presidente de C.A.U.S.E.

Después de la tercera o cuarta vez que repartieron volantes, Amazon llamó a la policía. “No contra los trabajadores, que se encontraban en la propiedad de la compañía”, dijo Blackwell, “sino contra nuestros voluntarios, que estaban en la acera. Los policías simplemente vinieron y les preguntaron qué estaba sucediendo. No pasó nada. Pero claramente fue intimidación”, dijo.

Albert Elliott, miembro de C.A.U.S.E., repartiendo volantes frente a RDU1.  (Foto: C.A.U.S.E.)

El implacable ritmo de trabajo es una de las principales quejas de los trabajadores. “Amazon monitorea la productividad cada segundo. El trabajo implica una gran cantidad de movimientos repetitivos que causan tensiones en tu cuerpo, que se ven exacerbadas por las largas horas y por no tener un edificio climatizado. Todo el mundo está un poco adolorido en Amazon. En cada estación hay algunos diminutos ventiladores afianzados con pinzas. A veces vemos ventiladores de tamaño industrial en los pasillos, pero solo en algunos departamentos. Así que el calor, el movimiento repetitivo y los descansos tan cortos, esos son algunos de los problemas”, explicó Blackwell.

Carolina del Norte tiene una tasa de afiliación sindical que es la segunda más baja del país, con un 2.6%, superada solamente por Carolina del Sur, con una tasa del 1.7%.

“Uno de nuestros mayores desafíos es el miedo basado en la falta de información. Mucha gente piensa que debido a que NC es un estado con leyes de ‘derecho al trabajo’, los sindicatos no son legales”, dijo Blackwell. (Las leyes del “derecho al trabajo” significan que, donde existe un sindicato, los empleados no están obligados a afiliarse o a pagar las cuotas sindicales, a pesar de que están representados por el sindicato y protegidos por su contrato). “Tienen miedo de ser despedidos si hacen algo para llamar la atención a su persona”, continuó Blackwell. “No saben lo que es un sindicato. Tenemos que explicarles cuáles son los beneficios de un sindicato. Pero cuando logramos tener estas conversaciones, la gente está a favor de nosotros porque todo el mundo sabe que $15.00 la hora no es suficiente“, explicó.

C.A.U.S.E. colabora con el Sindicato de Trabajadores de Amazon (ALU), así como con otras dos organizaciones, BAmazon y Amazonians United (AU). “Asisten a las reuniones de nuestro comité directivo y a las reuniones de membresía para hablar sobre sus experiencias, hablar sobre lo que han aprendido”, dijo Blackwell.

Organizar las instalaciones de una en una

Algunos miembros de C.A.U.S.E. trabajan en otras instalaciones de Amazon en todo el estado, desde Durham hasta Greensboro, y quieren organizarse, pero por ahora el enfoque está en RDU1. “Al principio, pensamos que si organizábamos un montón de lugares al mismo tiempo, podríamos coordinar acciones en todo el estado y todos entrar en negociaciones contractuales juntos. Y que seríamos más fuertes, ¿no es cierto?” Dijo Blackwell. “Bueno, el ALU pensó lo mismo, y luego nos dijeron que no funcionó”. Blackwell se refería a la derrota electoral del ALU en el centro de clasificación de Amazon LDJ5 en Staten Island el pasado abril. (Ver Perdimos esta batalla pero ganaremos la guerra.)

“Hemos visto la dificultad de tratar de organizar varias instalaciones a la vez”, agregó Blackwell. “Vamos a enfocarnos en organizar una instalación a la vez porque no queremos repetir los errores de otros lugares. En última instancia, queremos apoyar los esfuerzos por organizar sindicatos en todo el estado. Pero estratégicamente, por ahora, decidimos que es mejor enfocar todos nuestros esfuerzos en un solo lugar a pesar de que tenemos los organizadores, los recursos humanos, para ayudarnos en otros lugares también”, dijo Blackwell.

BAmazon está buscando organizar el Centro de Cumplimiento BHM1 de Amazon en Bessemer, Alabama. Está afiliado al Sindicato de Tiendas Minoristas, Mayoristas y Grandes Almacenes (RWDSU). La RWDSU perdió una elección de representación en Bessemer en abril del 2021. La NLRB, sin embargo, ordenó una segunda votación cuando descubrió que Amazon interfirió indebidamente en esa elección. El resultado de la segunda votación sindical, celebrada en marzo del 2022, fue demasiado reñida como para proclamar a un ganador ya que hubo más de 400 votos impugnados, los suficientes para superar el déficit del sindicato. La NLRB aún no ha celebrado una audiencia sobre las boletas impugnadas.

Los miembros fundadores de C.A.U.S.E., el reverendo Ryan Brown y Mary Hill, reconocen el impulso organizativo de BAmazon como una influencia que los motivó a formar su propia organización. Blackwell señaló que como ambos almacenes están ubicados en el sur, en estados con leyes de “derecho al trabajo”, C.A.U.S.E. y BAmazon enfrentan retos similares para organizarse.

Los cofundadores de C.A.U.S.E. Mary Hill (izquierda) y el reverendo Ryan Brown. (Foto: C.A.U.S.E)

Sin embargo, a diferencia del modelo de organización que han liderado los trabajadores de C.A.U.S.E., “gran parte de la organización en Bessemer no era interna, no era de los trabajadores de la planta”, dijo Blackwell. Pero las dos organizaciones colaboran estrechamente. “Hablamos mucho con la gente de Alabama”, dijo. “Estuvimos en una llamada con la RWDSU la semana pasada. Los sindicatos están muy dispuestos a ayudarnos y hemos estado en conversaciones con ellos sobre lo que necesitamos. Estamos buscando sindicatos que puedan ayudarnos financieramente, con organizadores y capacitación, sin que nos afiliemos formalmente. Sin embargo, toda la organización hasta la fecha ha sido realizada por nuestros trabajadores-organizadores y voluntarios”.

Amazonians United (AU) se auto describe como un “sindicato autoorganizado”. No está afiliado a ningún sindicato establecido. El AU rechaza como “reformista” el proceso de someterse a elecciones sancionadas por la NLRB y de buscar la certificación por parte de la junta laboral. Se declara sindicato y exige el reconocimiento de la empresa sobre esa base, respaldando sus reivindicaciones con la acción directa en el lugar de trabajo a través de su red de “comités de trabajadores”. Está basado en varias estaciones de entrega en Chicago. El grupo tiene filiales en estaciones de entrega de Amazon en todo el país, incluida la ciudad de Nueva York; Carolina del Norte; Sacramento, California; y Jacksonville, Florida.

C.A.U.S.E. se reunió por primera vez con miembros del AU en una reunión de la Asamblea de Trabajadores del Sur, que reunió a organizadores de todo el sur del país.

Pancarta de la Asamblea de Trabajadores del Sur del sitio web de ese grupo.

Según su sitio web, la Asamblea de Trabajadores del Sur busca “organizar a la clase obrera que no se encuentra organizada en todo el Sur”. Es una red de sindicatos locales, organizaciones de trabajadores y comités organizadores, “comprometidos con el establecimiento de un sindicalismo democrático de base del movimiento social (o sindicalismo con una agenda de justicia social)”.

‘Desarrollar el poder de salir en huelga’

“Tenemos un enfoque muy diferente para organizarnos”, dijo Blackwell. “Estoy de acuerdo con el principio básico que dice que ya somos un sindicato. Cada vez que los trabajadores se organizan juntos, eso es un sindicato, incluso sin el reconocimiento de la NLRB o sin un contrato. Estoy convencida de eso. Organizarse para ralentizar el ritmo de trabajo o para salir en huelga es el eje de nuestro poder. Pero eso no debería impedirnos buscar la certificación de la NLRB y un contrato”, insistió. “Y los desafíos de organización que enfrentamos en un edificio de nuestro tamaño son diferentes en comparación con estaciones de entrega mucho más pequeñas”, explicó. “Estas estrategias se complementan entre sí. El reconocimiento de la NLRB y la lucha por negociar un contrato complementan la rigurosa organización necesaria para desarrollar el poder de la huelga. Queremos las dos cosas. Queremos lo mejor de ambos mundos, si eso tiene sentido”, dijo Blackwell.

Blackwell se siente cautelosamente optimista de que para este otoño ya estarán en condiciones de comenzar a recolectar tarjetas de autorización sindical para realizar una elección auspiciada por la NLRB. “Tenemos un equipo muy fuerte”, dijo. “Puede que no tengamos mucha experiencia, pero el punto de inflexión para nosotros es lo mucho que hemos aprendido de los demás. Para cuando se realice una elección, ya habremos dominado el manual de tácticas antisindicales de Amazon y podremos defendernos contra eso. Vemos la organización como un movimiento social. Creo que cumplimos con los requisitos necesarios para tener éxito”.

C.A.U.S.E. es una organización muy disciplinada. “Como ya sabemos a qué atenernos gracias a las experiencias de los demás, como del ALU, necesitamos mantener a nuestro equipo en alerta”, dijo Blackwell. “Tenemos que observar las reglas y no hacer nada que pueda causar que te despidan. Tenemos que ser empleados A+. Por ejemplo, no repartir volantes durante horas laborales. No queremos que nos lleven a los tribunales innecesariamente porque dicen que violamos alguna regla”.

Blackwell enfatizó la importancia de esta disciplina porque “Amazon se encuentra actualmente en un frenesí de despidos y muchas personas que se van acercando a la fecha de su segundo aniversario de empleo están siendo despedidas. Esto es excepcional porque la tasa de rotación en Amazon es tan alta que es difícil permanecer empleado allí durante 2 meses, y mucho menos 2 años. Una forma en que Amazon se deshace de la gente es con exámenes “aleatorios” de detección de drogas. Incluso cuando los resultados no son definitivos (lo que significa que la prueba no muestra un resultado positivo), los gerentes pueden mandarte a casa. Esto ocurre aunque exista una discapacidad documentada o un medicamento recetado por un médico”.

Los líderes de C.A.U.S.E. Destiny Blackwell (al frente, izquierda) y el reverendo Ryan Brown (a la derecha de Blackwell) con seis voluntarios que ayudan a crear volantes para promover apoyo y para ayudar a impulsar la organización sindical en RDU1. (Foto: C.A.U.S.E.)

C.A.U.S.E. tiene una presencia muy visible y activa en la planta. El reverendo Ryan se inició de ministro a una temprana edad. Aprendió sus destrezas de organización en la iglesia afroamericana, que es una experiencia común en el sur. No se deja intimidar fácilmente por la gerencia y está dispuesto a defender a los trabajadores que son amenazados con amonestaciones escritas o con despidos. “Nuestros compañeros de trabajo ven que es posible organizarse y defenderse”, dijo Blackwell refiriéndose el ejemplo de Ryan. “Los inspira. Los envalentona. Les da confianza para hablar sin temor a represalias”.

Blackwell relató la historia de un odiado gerente en el muelle de carga de salida que era insultante y un bravucón. C.A.U.S.E. emprendió la lucha contra ese abuso. “Cuando nos enfrentamos al gerente en defensa de los trabajadores, todo el departamento decidió unirse a C.A.U.S.E.”, informó Blackwell. “Esto es algo que un organizador de fuera no podría hacer.” C.A.U.S.E. publicó el nombre y la foto del gerente en su cuenta de Twitter y escribió: “Terry Fan, literalmente facilitas nuestros esfuerzos de organización por la forma en que tratas a tus asociados. Hoy eres el verdadero MVP (Jugador más valioso). Por favor, sigue con el buen trabajo”.

C.A.U.S.E. hace uso extensivo de las redes sociales para compartir videos de trabajadores de RDU1 explicando por qué apoyan al sindicato. “Todo el día la gente se detiene para hablar con el reverendo Ryan. Llaman a su estación de trabajo ‘el confesionario'”, dijo Blackwell. Algunas de estas conversaciones se convierten en breves testimonios de los trabajadores, que son grabados por el reverendo Ryan mientras están de descanso.

“Cuando hago estas entrevistas, mucha gente insiste en hablar sobre las condiciones de trabajo de Amazon porque es difícil imaginar hacer un trabajo tan físicamente exigente durante diez o doce horas”, dijo Blackwell. “Pero el asunto es que estamos en nuestro derecho de tener un sindicato. Amazon hace todo lo posible por convencernos de que no queremos tener poder propio. Nos merecemos tener lo necesario para vivir y no vamos a dejar que Amazon nos detenga. Esta es la clave esencial de nuestra organización: que la gente confíe en su propio poder”.



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